jueves, 30 de julio de 2015

WHAHAPPAN? "Dead Man" (1995) de Jim Jarmusch, un western antropológico

WHAHAPPAN?         Por Miguel Florián


Tras los créditos finales del filme Dead man de Jim Jarmusch, se lee: Whahappan? ¿Qué pasó? Sí, ¿qué es lo que ha ocurrido a lo largo de las dos horas del filme?

Ya en los títulos de inicio nos encontramos con una desconcertante cita del escritor belga Henry Michaux: “No es conveniente viajar con un hombre muerto”. Y, poco después,  nos  adentramos en la historia de un hombre, de un hombre joven. Casi parece un niño, con sus gafas, desorientado en un territorio ajeno y desconocido. 



Asistimos a la historia de un hombre que viaja en tren, que partió desde el mundo civilizado (Cleveland) y se dirige a un miserable pueblo, Machine, perdido en el oeste norteamericano, con el propósito de trabajar como contable en una fábrica metalúrgica. Viste un traje a cuadros y chistera. Su pulcritud contrasta ridículamente con la de los rudos compañeros de viaje.  El maquinista del tren, inexplicablemente, abandona su trabajo y se sienta frente a él, le hace preguntas que le intimidan; paradójicamente, ese trasunto de Caronte, conoce qué habrá de ocurrirle. Ya en la estación de llegada, desciende del tren y camina por las calles de Machine en dirección al lugar de su trabajo. Las calles enlodadas, mugrientas… Los transeúntes de miradas torvas parecen amedrentarle… Todo es sucio allí, repugnante, inmundo…  Una vez en el antro de la fábrica se entera, entre risas, que ha llegado demasiado tarde y el trabajo se le ha encomendado a otra persona. Sin trabajo y sin dinero, deambula por el pueblo encenagado. Conoce a una mujer llamada Thel, que inevitablemente nos recuerda al Libro de Thel del poeta y pintor inglés William Blake. 

CONVERSANDO CON MARÍA LORENZO: PINTURA Y ANIMACIÓN

 María Lorenzo Hernández, torrevejense de origen, nació en Alicante en 1977. Actualmente es profesora de Animación en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Politécnica de Valencia, donde también obtuvo su doctorado. Después de experimentar con una técnica muy personal y artesanal, como es la pintura animada, tras un cortometraje tan interesante como “La pantera de Rilke” (2000), en el que reflexiona sobre la libertad, se lanza a proyectos de mayor envergadura como “Retrato de D.”(2004) y “La flor carnívora” (2009), trabajos que han obtenido una gran difusión nacional e internacional, como también el proyecto colectivo “El gato baila con su sombra”, del que fue directora. María no descansa y, con una reciente maternidad, sigue con su actividad docente y de realización con grandes ideas para llevar a la práctica. En una conversación virtual nos ha contado cosas muy interesantes sobre cómo llegó a Bellas Artes y sobre su  trabajo como animadora. 

P: ¿Qué querías ser de mayor?
R: Pues diseñadora de modas. La mayoría de mis primeros dibujos eran de mujeres cuya apariencia me fascinaba, con sus vestidos antiguos, modernos o lujosos. Llenaba montones de blocs con esos temas. Recuerdo que una de mis pelis favoritas era "Mi desconfiada esposa", de Vincent Minelli, con una glamourosa Lauren Bacall. Y que me encantaban los libros de dibujo de moda que teníamos en casa, los cuales me ayudaron a aprender a dibujar con un poco de sistemática, desde lo general a lo particular.

OSA Y MARTIN JOHNSON, DOS EXPLORADORES EN HOLLYWOOD




Osa  Helen Leighty  está considerada como una de las precursoras del documental etnográfico. Nacida en 1.894  en Chanute, una pequeña población de Kansas, nada parecía indicar que acabaría dedicándose  a la exploración y rodaje de  películas en parajes salvajes y exóticos. Pero se cruzó en su camino Martin Johnson (1884-1937),  un descendiente de emigrantes suecos, que estaba poseído por el afán de aventuras. Por ello, a sus 18 años  no dudó en enrolarse en el Snark, a las órdenes del célebre novelista Jack London, para dar la vuelta al mundo. El viaje resultó un desastre por culpa de las tormentas y las enfermedades y, por ello, acabó tres años antes de lo previsto. Pero durante la singladura Martin tuvo ocasión de poner en práctica sus conocimientos de fotografía, que había adquirido en la pequeña tienda de su padre. A su vuelta a Estados Unidos, en 1909, decidió organizar una especie de espectáculo de vodevil en un teatro de Kansas. Mientras  proyectaba las fotos tomadas en el Pacífico, bellas jóvenes interpretaban canciones  evocadoras de aquellos lejanos paraísos. Osa acabó participando como cantante en el show, y se casaron después de un noviazgo relámpago. Los  planes de Martin seguían siendo  recorrer el mundo y, al cabo de siete años, con su  espectáculo itinerante consiguieron recaudar el dinero necesario para ello. Por cierto que, en 1911, el fotógrafo Edward S. Curtis también estrenó un gran espectáculo de fotografías de los indios americanos con música orquestal en vivo, y sería muy interesante estudiar si existieron influencias entre el trabajo de Martin Johnson y el de Curtis. Para quienes tengáis interés en profundizar sobre el gran proyecto  de Curtis The Vanishing Race, podéis acceder en este enlace: http://anthropotopia.blogspot.com.es/2013/09/edward-s-curtis-fotografia-y-etnografia.htmlEn cualquier caso, es claro que en aquellos tiempos sin televisión existía un gran interés popular por acudir a estas performances, para poder conocer el mundo más allá de los lindes de la propia ciudad.

LOVECRAFT EN EL MEDITERRÁNEO. "La nit de l ´oceà", un cortometraje animado por María Lorenzo

Dialogamos con la directora María Lorenzo, para que nos cuente todos los detalles de su último cortometraje de animación. 


En tus cortos anteriores, Retrato de D. y La flor carnívora, animabas tus propios guiones. Sin embargo, La nit de l’oceà se basa en La noche del océano, un cuento de Robert H. Barlow, un autor con un enorme talento pero que permanece a la sombra de su mentor, el célebre Lovecraft. ¿Qué te ha llevado a escoger precisamente ese texto para tu nuevo cortometraje?

ML: Puede que el texto me escogiera a mí. En 2002, antes de haber comenzado ninguno de los otros cortos, me compré varios libros de Lovecraft que llevaban ilustraciones de H.R. Giger en la portada. A Giger lo habíamos conocido en unas lecciones de doctorado sobre Anatomía y Morfología Estética, y en estas clases incluso habíamos visto Alien (una película de lo más lovecraftiana). Así que sentí curiosidad por el escritor. Pero cuando leí La noche del océano en su volumen de “relatos inéditos” (en realidad, escritos de sus amigos mayormente), este relato me llamó la atención más que ningún otro. Parecía distinto al estilo general de Lovecraft porque en su literatura siempre se comienza intuyendo lo fantástico, y en el desenlace se confirma. Pero en este cuento, no: lo fantástico es una posibilidad, pero, sea cierta o no, la única certeza que nos queda, la de que el mar nos recuerda diariamente, es que un día será lo único que siga moviéndose en este planeta.

ZORBA EL GRIEGO: EL HOMBRE A TRAVÉS DEL CUAL BAILA LA VIDA


 Acabo de encontrar en el bolsillo de la chaqueta de mi padre un breve poema que dice:

           “No volverá
            ni un segundo
            ni un aire
            ni uno mismo.

           Es lo suyo”

   Está firmado por Antonio García Soler, a quien no conozco. La  pregunta que me hago es, cómo pudo mi padre, pescador y marinero de una pequeña aldea griega, aficionarse a la poesía. Y entonces recuerdo unos acontecimientos sucedidos hace muchos años, que nos dejaron a todos una profunda huella, y a mi padre, quizás, algún libro de poesía.

LA VIDA ES BELLA. Cine y Holocausto.

La vida es bella (1997) es, quizá, la mejor película dirigida por Roberto Begnini, con la que obtuvo el Oscar al mejor actor en 1998. Está basada en las memorias de Rubino Romeo Salmoni, que logró sobrevivir al Holocausto. Tras ser liberado de Auschwitz en 1945, escribió un libro con el significativo título de Al final derroté a Hitler. Entusiasmadas con el film, que pudimos degustar en su versión original y en sala de cine, como debe ser, María Lorenzo y yo escribimos sendos comentarios, el suyo mucho mejor que el mío, indudablemente. El otro día, mientras buscaba unos papeles, aparecieron juntos en una carpeta, y he pensado que pueden seguir juntos en soporte digital.