martes, 15 de noviembre de 2022

PERSUASIÓN AMISTOSA

 


Se llama cuáqueros a los cristianos de la Sociedad Religiosa de los Amigos o Iglesia de los Amigos fundada en Inglaterra por George Fox (1624-1691) a partir de los legatinos-arianos, también llamados seekers o buscadores, disidentes del protestantismo anglicano oficial. La palabra "cuáqueros" viene del inglés "quakers", tembladores, aunque no sabemos bien si porque -como Kierkegaard- sentían temor y temblor cuando se sentían sacudidos por el Espíritu Santo, o por la instrucción de "temblad en el nombre del Señor" dada por Jorge Fox, o como término despectivo referente al pacifismo de los fieles de la Iglesia de los Amigos. 

Los antiguos cuáqueros vestían una indumentaria llana y sencilla; abstemios, se negaban a jurar, pero fueron conocidos sobre todo por su pacifismo, por ser contrarios a cualquier forma de esclavitud y por su esfuerzo para recuperar un cristianismo primitivo o protoevangélico, al margen de cualquier jerarquía eclesiástica y ayuno de sacramentos y pompas.

Las ideas de George Fox seguramente no hubieran tenido ancho ni largo predicamento sin la ayuda de Margaret Fell, de soltera Margaret Askew (1614-1702) llamada "madre del cuaquerismo", que patrocinó a Fox y se desposó con él después de haber estado casada con Thomas Fell como señora de la mansión Swarthmoon Hall. Fell era juez de paz de Lancashire y miembro del Parlamento, del que cesó por desacuerdo con la autoridad de Oliverio Cromwell. 

En 1652 su esposa Margaret oyó los testimonios de Fox, abrazó su fe a la que se convirtió junto con muchos de su casa. Durante seis años la mansión Swarthmoor se convirtió en el centro de difusión de la fe, las ideas y las actitudes cuáqueras. Allí predicaban sus principales líderes, mujeres y hombres. Tras la muerte de su primer marido en 1658, la casa fue allanada por las fuerzas del gobierno.

Mary Dyer fue ahorcada en 1660, uno de los "mártires de Boston"

En 1659 miles de mujeres cuáqueras, las "Siete mil siervas", firmaron una petición al Parlamento inglés para que se revocara la obligación del diezmo que se pagaba al sacerdote de la iglesia oficial, pastor anglicano que solía ser nombrado a dedo por el aristócrata de turno. La petición describía lo sufrimientos de los Amigos encarcelados por su religión. El pago del diezmo violaba su fe y conciencia cristiana. El texto Al Lector aparece firmado por la Amiga Mary Forster. En el panfleto, las signatarias consideran apóstatas a quienes no siguen la austera interpretación del cristianismo que consideran genuino, y tratan del diezmo como una inaceptable opresión contra su libertad de conciencia.

La persecución inglesa de los cuáqueros no cesó hasta la Ley de Tolerancia de 1689. A través de una espiritualización de las relaciones humanas redefinieron su congregación secular como tribu santa, familia y hogar de Dios. 

Como una de las pocas fundadoras perteneciente a la alta sociedad, Margaret Fox intercedió por los miembros perseguidos o arrestados de la nueva iglesia y viajó a Londres, a petición del rey Carlos II, para defender en 1660 la libertad de conciencia ante el Parlamento. No le valió de mucho porque en 1664 fue encarcelada en Lancaster. Se la condenó a cadena perpetua y se le confiscaron sus bienes. 

Permaneció en prisión hasta 1668, entre rejas escribió epístolas y textos religiosos, así como su trabajo más famoso: Women's Speaking Justified, en el que justificaba el ministerio de las mujeres y su liderazgo religioso, argumentando a favor de la igualdad espiritual de sexos, premisa básica de los cuáqueros. Ambos, hombres y mujeres son capaces no sólo de poseer la Luz Interior, sino también la capacidad profética, atentas a esa voz que oyen en su conciencia como "susurro de una brisa suave". Margaret fundamenta en esta obra el papel religioso activo de la mujer aduciendo ejemplos de la historia bíblica, nombrando a cada mujer que ha profetizado, hablado o razonado en el Antiguo o el Nuevo Testamento.




Tras ser amnistiada por el rey, casó con George Fox en 1669, pero fue encarcelada de nuevo durante un año. Fox viajó de misión evangelizadora a América y también fue encarcelado a su regreso en 1673. Margaret marchó a Londres para interceder por él, que al fin fue liberado en 1675. Sobrevivió a su marido hasta 1702 en que falleció con 87 años.

La Iglesia de los Amigos se extendió en Norteamérica, especialmente por Pensilvania. Los cuáqueros no tienen un credo dogmático, pero confían en la capacidad de cada ser humano para vivenciar y testimoniar la Luz Interior como presencia de Dios en la conciencia de cada persona. Cada creyente es sacerdote según la Epístola de Pedro (1ª 2:9). Incluso existen cuáqueros liberales, favorables a la colaboración con otros cristianos, y no teístas. En todas partes, evitan estructuras jerárquicas. Una parte relevante de su comunidad practica el culto a la espera o culto no programado en reuniones domingueras.

Fotograma de Friendly Persuasion de Eilliam Wyler (1956)

Todo esto lo retrató magistralmente William Wyler en su comedia-drama Friendly Persuasion (1956) con Gary Cooper, Dorothy MacGuire y Anthony Perkins, en sus papeles principales. La traducción española La gran prueba, y la chilena La gran tentación, no hacen justicia al sentido del título original. "Friendly" refiere adverbialmente al nombre genuino del movimiento protoevangélico de la Iglesia de los Amigos (Friends) que enfatiza la relación directa con Dios a través del ejemplo de Jesucristo y la lectura y el estudio personal de la Biblia, buscando la pureza emocional y la luz divina con el objetivo de alcanzar la perfección cristiana.

La película de W. Wyler centra su motivo en el incómodo voto de pacifismo de una familia cuáquera con el telón de fondo de la amenaza de los rebeldes sudistas al final de la guerra civil norteamericana. El término "persuasión" y la expresión "amistosa persuasión" resultan pues muy apropiados como interpretación de una comunidad que hacía hincapié en la "conversación santa", con el fin de que habla y conducta reflejasen piedad, fe y amor fraterno, una comunidad que ofrecía nuevos roles a las mujeres haciendo de la madre cuáquera figura esencial en la educación de los hijos, en la regulación del matrimonio y en el comportamiento doméstico.

Wyler representa admirablemente esta forma de persuasión irenista y cordial en su película. Puede verse en ella un momento estelar en que Eliza (Dorothy McGuire), estricta esposa cuáquera, prohíbe a su marido Jess (Gary Cooper), al que le gusta la música, que introduzca en su casa el armonio que ha comprado en una feria. El granjero le dice entonces a la rígida esposa con toda tranquilidad: 

"Cuando ruegas o sugieres, soy como mantequilla [o masa] en tus manos, pero cuando prohíbes es tanto como ladrarle a la luna."

El ejército sureño ya ha quemado alguna granja de cuáquero, y uno de ellos, que no quería levantar espada contra el prójimo según su radical voto pacifista, insta a Jess a armarse contra el enemigo común y hacerle frente. Este se mantiene fiel a sus principios: "ningún hombre es mi enemigo", pero no puede evitar que su hijo Josh (un jovencísimo Anthony Perkins) tome el fusil y marche al frente para salvar lo propio. La madre no quiere, se opone, presiona al padre para que lo evite, pero Jess le dice: 

"Yo sólo soy su padre, no su conciencia. La vida de un hombre no vale nada si no vive de acuerdo con su conciencia". 

La historia acaba bien, todo armonía en la idílica granja de los cuáqueros, pero Wyles deja clara la inevitabilidad de la ira como emoción humana y reacción defensiva, y también matiza la diferencia entre decir siempre la verdad (imperativo cuáquero) y callarla, cosa que resulta conveniente en aras de la convivencia y no tiene por qué contradecir aquel imperativo. Esta mezcla de comedia y drama de Wyles encantó a los públicos y la película ganó la Palma de Oro del festival de Cannes en 1959.

Una familia cuáquera amante de la paz.
¿Se mantienen al margen o se involucran en el conflicto?

Según la Wikipedia,  en 2017 vivían en el planeta 377.557 cuáqueros adultos, el 49% de ellos en África, el 89% pertenecen a las ramas "evangélicas" y "programadas", que celebran servicios con cantos y un mensaje bíblico preparado o coordinado por un pastor. Un 11% practica el culto en espera o culto no programado (la oración silente recuerda a Erasmo), llamado Reunión para Culto, donde el orden no planificado del servicio es principalmente silencioso y puede incluir un ministerio vocal no preparado de los presentes, tal y como aparece en la película de Wyles. 

Hacia 1660 numerosos cuáqueros se establecieron en el noreste de los EEUU para fundar comunidades de "conversación sagrada", donde fueron los primeros en condenar la esclavitud. Fueron perseguidos, pero en Rhode Island, 36 gobernadores en los primeros 100 años fueron cuáqueros. La endogamia y los cismas han limitado la extensión de sus comunidades. En Kenia los cuáqueros son más de cien mil. En 1947 se otorgó a la sociedad de amigos el Premio Nobel de la Paz, recibiéndolo en representación del movimiento la Friends Service Council (Londres) y American Friends Service Committee (Filadelfia).

Instituciones financieras mundialmente conocidas como Barclays y Lloyds fueron fundadas por cuáqueros. El enorme poeta Walt Whitman fue cuáquero, así como la actriz y escritora Judi Dench, oscarizada en 1999. También lo fue la cantante Joan Baez. Frederick Winslow Taylor (1856-1915), procedente de una rígida familia de cuáqueros, es considerado el padre de la Administración Científica. El pacifismo cuáquero ha jugado también su papel en la fundación de organizaciones no gubernamentales con fines filantrópicos y sociales, como Amnistía Internacional o Greenpeace.